miércoles, 12 de enero de 2011

El Tesoro Mejor





Mi canción predilecta, sus palabras que eligió para la despedida, su imagen.

Sos mi infancia. Gracias.

Te quiero.

Me da ganas de llorar
la paciencia pobrecita
que echó al mundo tanto abrigo
allá por las anilinas.
Hebra por hebra, día tras día.

Estirando en el telar
secretos de abuela india,
la América de memoria
el mujerío eterniza.
Nudo por nudo, día tras día.

Cómo no reverenciar
prendas con dolor habidas.
Perdón les quiero pedir
porque me las echo encima.